En cuestión de tamaño, nos gana el Sol, el ego ya es otra cosa.
Es curioso la forma en la que algunos temas surgen, como por ejemplo el de este post. No se que engranaje giró en la cabeza de mi novia, que en plena sobremesa con café de por medio me sale con, ¿y cuando el sol explote? ¿que va a pasar? Me quedé un par de segundos pensando en como contarle la enjundia del asunto, así que decidí que el mejor modo de contarle el asunto era a través de unas cuantas líneas escritas con cariño. Siempre las escribo con cariño, si no lo hiciera no estaría aquí ahora mismo, pero esta vez es un poco mas especial. Me gustó el tema del Sol, ya que es un gran incomprendido. Siempre está ahí, dándonos luz y calor, unas veces mas y otras menos, pero siempre podemos contar con él. Además se puede decir que el sol es uno de los máximos responsables de que hoy haya humanos caminando por la superficie del planeta Tierra. Creador de vida en primer lugar y su destructor en último, pués como todas las cosas, las estrellas nacen, viven y mueren. Quizás no tenga la misma trascendencia metafísica que la muerte de un ser querido o un simple humano, ya que cada día miles de personas mueren en minas o en guerras de las que no tenemos ni idea y parece ser que lo llevamos bien. Pero el Sol es especial, ya que es un tipo que se lo toma todo a la tremenda y que le gusta eso de morir matando, así que vamos a desentrañar un poco sus misterios.
Las diferentes Clases Espectrales.
Vamos a comenzar con lo básico. ¿Que es el Sol? Pues todo el mundo sabe que es una estrella de clase espectral G2. Bueno, quizás no mucha gente sepa lo que es una clase espectral, pero no es nada complicado. Las clases espectrales es una clasificación de tipos de estrellas segun su temperatura, de más caliente a mas fría. No me quiero enredar mucho con este tema que si no se me va de las manos y la podemos líar, así que basta con decir que nuestro querido y amarillo Sol es una estrella normalita, del montón.
El Sol es básicamente un horno termonuclear (se me llena la boca con esa palabra) en el que el hidrógeno se "quema" para proporcionarnos luz y calor. Específicamente lo que ocurre en el sol es una reacción de fisión en la que el hidrógeno, por medio de las altas presiones y temperaturas, se transforma en helio. Este proceso, llamado Nucleosíntesis Estelar es el responsable de que el Sol nos caliente por las mañanas y de hacer brillar a los vampios de Crepúsculo (tócate los cojones). Esto ocurre continuamente desde que nuestra estrella preferida nació hace aproximadamente 4500 millones de años, y durante todo ese tiempo, se estima que el sol transforma alrededor de 600 millones de toneladas de hidrógeno en 596 toneladas de helio. ¿Dónde están las toneladas que faltan? Pues transformadas en energía luminosa, térmica y unas cuantas cosas mas que no vienen al caso, como los neutrinos (me lo trincas todo).
Es el fin de Boo!!(humor del fino)
He aquí el origen de todas las cosas. Sí, la nucleosíntesis estelar es la responsable de la existencia de todas las cosas, pues desde el mísmo origen del Universo ha estado presente. En el mismo corazón de las estrellas convirtió y convierte el hidrógeno en helio, y luego el helio en carbono. Éste a su vez, puede transformarse en oxígeno, magnesio o sodio y así sucesivamente dando lugar a la mayoría de elementos que componen la existencia. Ese es el verdadero origen de todas las cosas, todo lo que vemos, la pantalla que estás mirando o el lápiz con el que escribes, todo, viene del corazón de una estrella, que al morir, lanza al inmenso vacio del espacio todos estos elementos.
Pero, ¿cuando le llega la hora a una estrella? Pues cuando ya no tiene nada para "quemar". Cuando la nucleosíntesis estelar comienza a fallar, la estrella empieza su lento declive que puede durar miles de años.
Puesta de Sol cuando éste comience a morir.
Como ya dije antes, el proceso que transforma el hidrógeno en helio es el que mantiene a la estella en plena forma, pero cuando el helio empieza a transformarse en carbono, el proceso ya no es tan efectivo, produce menos energía, y la transformación del carbono, menos energía aún.
Esto conlleva unos cambios físicos bastante aparentes en la estrella. Al cambiar el los elementos en la nucleosíntesis y ser ésta menos eficente, el Sol comenzará a hincharse, necesita hacerlo para mantenerse a estable y no derrumbarse sobre sí mismo. Se hincha de tal manera, que gradualmente engullirá la órbita de Mercurio, planeta incluido. Venus correrá la misma suerte, y nuestro querido planeta Tierra también. Aunque ya no será el planeta que conocemos, estará quedamado y arrasado debido al gradual crecimiento del Sol, que arroja grandes cantidades de energía mientras se hincha poco a poco. Ese, será el destino final del planeta tierra. El astro Rey, quedará reducido a una simple Enana Blanca, que con el paso de los eones, se irá apagando.
El Sol hizo especial a la Tierra, proporcionándole varios de los ingredientes necesarios para que surgiera la vida. Y el mismo acabará con nuestro querido punto azul pálido, poniendo punto y final a una diminuta historia, en un pequeño rincón de la galaxia, situada en algún recóndito lugar del Universo. El último suspiro del Sol.
Pero antes de que ocurra todo esto, siempre habrá una última bonita puesta de Sol.
No tengo duda alguna que el ser humano NO estará para contemplar tal evento, ya que al sol le quedan unos 5000 millones de años de combustible antes de comenzar a hincharse y seguro que antes nos habremos extinguido, por una razón u otra, no viene al caso. Yo de mientras, seguiré disfrutando de buenos ratos con buena gente, ya sea en sobremesas con un café y mi novia sorprendiéndome con preguntas inesperadas, o simplemente sosteniendo las llaves de mi casa pensando que en mis manos tengo los restos de una estrella muerta.